Leyendo el comunicado de la banda terrorista, Aspiazu recalca el perdón a los "daños colaterales", pero en ningún momento a Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (Policía Nacional, Local o Autonómicas, Guardia Civil y Ejército), políticos, juristas o periodistas. También sigue señalando a España y Francia como "Estados opresores que persisten en la via represiva" y que han ido juzgando a "ciudadanos vascos"
La Asociación de Víctimas del Terrorismo de la Comunidad Valenciana no ve que este comunicado sea ni sincero, ni que vaya a facilitar la paz en el Pais Vasco. Reconocemos un primer paso, pero muy insuficiente, ya que para empezar deben reconocer sus hechos y pedir perdón a todas y cada una de las víctimas. Nosotros no distinguimos entre policias y "daños colaterales", nosotros vemos familias desgarradas por el dolor provocado por la barbarie de gente como Txeroki, quienes no han dudado en apretar un gatillo, activar un dispositivo o chantajear a la sociedad con secuestros o impuestos revolucionarios.
Consideramos que una vez más, ETA se burla de las víctimas del terrorismo y de la sociedad en general, y por tanto pedimos como siempre el mayor rigor en la actuación de la justicia ante estos personajes que antes que cualquier otra cosa, son asesinos de sangre fría, que despues de tantos años y mas de 900 victimas aun tienen la desfachatez de cerrar el comunicado con la siguiente frase: "Sembremos el grano de una paz justa y duradera. Este es el compromiso de ETA." Por desgracia, no es lo que han demostrado despues de decadas de violencia, y las victimas no vamos a aceptar la retorica,sino los hechos y la actuacion de la justicia con todas sus consecuencias.
Francisco Morato Carrillo
Presidente AVTCV
Adjuntamos el comunicado de ETA para que cada uno de nosotros pueda reflexionar ante las palabras de los terroristas.
Garikoitz Aspiazu "Txeroki", bromeando con los demas inculpados |
Las personas presentes ante este tribunal somos miembros de ETA y reivindicamos humilde pero orgullosamente nuestra militancia. Hoy, ejecutando una misión confiada por nuestra Organización, vamos a hablar en nombre de ETA:
Nos habéis conducido ante este tribunal como secuestrados políticos. Nos habéis traído para juzgarnos y para condenarnos, como antes habéis hecho antes con otros muchos ciudadanos vascos.
Luchamos en favor de la libertad de nuestro país. Asumimos la responsabilidad de nuestra elección y de nuestros actos. Sin embargo, no reconocemos la legitimidad para juzgarnos de este tribunal que representa al Estado francés, Estado que niega los derechos del País Vasco y que persiste en la vía represiva.
Sin embargo, no hemos venido a reivindicar la guerra o a alimentar la confrontación. Queremos aprovechar esta ocasión para hacer llegar un mensaje en favor de la resolución del conflicto vasco en el corazón de los aparatos del Estado francés.
En diciembre pasado, cuando Manuel Durao Barroso y Herman Van Rompuy, responsables de la UE recibieron el premio Nobel de la Paz, pusieron de manifiesto el valor de la negociación como medio para la resolución de los conflictos. Además, recordaron las palabras de Jean Monet que decían: "Es mejor pelearse alrededor de una mesa que en un campo de batalla".
Los dirigentes de España y Francia que estaban presentes parece que aprobaron esas palabras, a pesar de su actual rechazo a una negociación en favor de la resolución del conflicto en el País Vasco.
Durante muchos años hemos luchado en el campo de batalla. Demasiado tiempo, demasiado sufrimiento. Demos entonces una oportunidad al diálogo. Llevemos el conflicto a la mesa de la negociación.
Como dijo Van Rompuy en Oslo: Acabemos con el ciclo de la violencia, pongamos de lado la lógica de la venganza política.
ETA actúa en ese sentido y para ello ha tomado decisiones históricas para que el proceso de resolución sea irreversible. ETA anunció el fin de la lucha armada en octubre de 2011. Nuestro compromiso es real, no hay ninguna estratagema. Lo que es importante es que ETA ha seguido los deseos de los ciudadanos vascos.
En noviembre pasado, ETA hizo una propuesta precisa para resolver las consecuencias del conflicto. Esta propuesta era sólida y constructiva, reveladora del compromiso de ETA. Aspiramos a dibujar un proceso útil para un final estable y ordenado de la confrontación armada.
Eran propuestas dirigidas a los gobiernos español y francés sobre varios temas y un calendario de diálogo de la paz:
Las fórmulas y los plazos para el regreso a casa de todos los presos y refugiados políticos vascos.
Las fórmulas y los plazos del desarme de ETA, del desmantelamiento de las estructuras armadas así como la desmovilización de sus miembros.
Las etapas y los plazos de la desmilitarización del País Vasco, adaptando las fuerzas armadas en el País Vasco al fin de la confrontación armada.
Además, ETA ha expresado su disposición a hablar de las víctimas y de las personas que han sufrido un daño a causa de la confrontación.
Reiteramos aquí y ahora nuestro llamamiento al Gobierno francés para que se implique en esta resolución. Que aporte sus propuestas a la mesa de negociación. Que defienda sus posturas con el mismo vigor que ha mostrado en la represión de los ciudadanos vascos, si lo desea así, pero que no cierre la puerta a esta oportunidad para la paz.
Igualmente consciente de las dificultades que pueda encontrar en este proceso, ETA piensa que existen posibilidades de avanzar si se abren las vías de diálogo. Y prometemos que invertiremos la misma valentía y determinación que hemos demostrado para hacer frente al enemigo para alimentar las negociaciones y conducir el proceso de resolución a su término.
Sabemos que solucionar las consecuencias del conflicto no constituye más que un paso de la resolución complementaria de otros espacios de discusión necesarios.
Para que esta resolución sea duradera, más allá de las consecuencias del conflicto, habrá que sobrepasar las razones de este conflicto político. Con actores y ciudadanos del País Vasco, en un proceso democrático, debatirlos, buscar los puntos de acuerdo y concluir acuerdos.
También hay que cerrar muchas heridas ocasionadas por esta confrontación. Son heridas profundas y dolorosas. Es responsabilidad de todos intentar curarlas.
Una familia de Orio se ha visto implicada en los hechos que (serán) evocados aquí. Repetimos que no reconocemos la legitimidad de ese tribunal para juzgarnos. Sin embargo, ETA no niega su responsabilidad sobre estos hechos. Luchamos contra dos estados opresores y a veces, con nuestros medios populares, para enfrentarnos a esos Estados, hemos tenido que adoptar decisiones que no nos han gustado.
La organización ETA quiere decir a estos ciudadanos de Orio que lamenta el daño que les ha podido causar. Estas palabras se pueden extender a todos los ciudadanos que, como ellos, sin ninguna responsabilidad en este conflicto, han sufrido un daño a causa de la actividad de ETA.
Sembremos el grano de una paz justa y duradera. Este es el compromiso de ETA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario